Habitaciones cómodas y nuevas

Desayuno completo y autoservicio. Ubicación cerca de San Pedro y estación de bus y tren.- Atención excepcional de Verónica

Nada.

las habitaciones con un bonito balcón, un aire acondicionado que funciona y además un balcón. comida increíble y bebidas alcohólicas. ubicación muy buena, la mejor y tranquila en la ciudad, cerca de las atracciones turísticas.

Nos ha molado todo en este hotel. La ubicación cumplió mis expectativas. Es un sitio cómodo para unas vacaciones en Roma...

Para nosotros fue ideal.

La ubicación es perfecta para recorrer El Vaticano y visitar las atracciones turísticas en Roma. Las habitaciones y baños son amplios y están muy limpios. El desayuno es completo. Buena atención por parte del personal, especialmente de Bhelle y Verónica.

Me sentí muy bien, no tengo ninguna queja en absoluto.

El personal y el servicio son estupendos. Habitaciones funcionales, sorprendentemente nuevas con un bonito balcón.

El hotel es pequeño pero las habitaciones son cómodas, con camas nuevas y baños grandes. También está cerca de la plaza de San Pedro y de la estación de bus y tren. El desayuno es completo y a buen precio, con muchas opciones para elegir. Se puede visitar varias plazas caminando, como la Fontana di Trevi. El personal es amable y atento.

Me sentí totalmente como en casa, no tengo ninguna queja en absoluto.

Buena ubicación cerca de Ciudad del Vaticano y el centro de la ciudad. Excelente limpieza y atención del personal, especialmente Veronica. Cambio de toallas cada dos días sin necesidad de solicitarlo. Espacios pequeños pero funcionales. Permite comer en el cuarto del desayuno el último día.

Está a un paseito de una estación de metro, fácil para moverse. Un baño excelente y una habitación funcional y moderna.

El hotel es pequeño pero las habitaciones son muy cómodas. El desayuno es muy completo, autoservicio. Muy buenas camas, todo nuevo, el baño es grande y lo mejor está muy cerca de la plaza de San Pedro. También está cerca de una estación de tren si se llega por este medio a la ciudad.

Recomiendo este hotel, es total.

El personal era extremadamente eficiente, el hotel es moderno. Ubicación cómoda en un bonito barrio, en una zona tranquila. Está a 2 km de lugares turísticos como la Plaza Navona. Hay un restaurante auténtico en el hotel. Unos servicios muy buenos. Toda la experiencia fue perfecta, no he tenido ningún inconveniente, os recomiendo este fantástico lugar.

Excelente ubicación cerca del Vaticano. Personal atento y amable.- Habitaciones limpias y modernas.- Terraza en la habitación para disfrutar del aire fresco.

Todo está bien.

La estancia en Vatican Relais fue perfecta. La ubicación cerca del Vaticano y del centro de Roma es ideal, especialmente si te gusta caminar. Todos los empleados, especialmente Verónica, fueron excelentes y estuvieron atentos en todo momento para resolver cualquier pregunta o proporcionar ayuda. Incluso nos cambiaron las toallas cada dos días sin necesidad de solicitarlo. Además, las habitaciones estaban muy limpias y el personal brindó un servicio excepcional.

No tengo ninguna queja 😊.

La ubicación es ideal, muy cerca del Vaticano y de la plaza Risorgimento. El metro Ottaviano y los autobuses 81 y 23 están muy bien comunicados. Las habitaciones son excelentes, nuevas, muy limpias, amplias y con mobiliario moderno. Me sentí como en casa. El personal fue muy agradable, atento y profesional. Mi familia y yo quedamos encantados. Muy recomendable. En general, recomendaré este hotel.

El hotel se encuentra en un bonito barrio, a poca distancia de la mayoría de los lugares de interés. Además, está cerca del Vaticano y cuenta con habitaciones con balcones amplios, perfectos para tomar aire fresco. También se destaca el trato amable del personal, como lo menciona un huésped en su opinión.

La limpieza dejó un poco que desear, ya que algunos días no cambiaron las sábanas y el baño presentaba hongos en la ducha.

La ubicación del Vatican Relais es excepcional, a solo 2 minutos de la Plaza de San Pedro y de la Plaza de la Reconziliacione, con acceso rápido al metro y a múltiples líneas de autobuses. El desayuno es completo y las habitaciones tienen un amplio balcón. Además, la atención de Verónica fue excepcional, siendo comprensiva, gentil y atenta en todo momento. Sin duda, recomendaría este lugar a mis familiares y amigos. En general, la experiencia en el Vatican Relais fue sobresaliente.

Aunque mi estancia fue en general muy buena, hubo algunos inconvenientes menores. El transporte público puede ser difícil de acceder y el aeropuerto queda lejos.